Ni mente, ni cuerpo están diseñados para ser libres sino para ir encadenando dependencia tras dependencia. Sólo somos libres para escoger nuestra próxima atadura, intentemos, al menos, elegir correctamente.Cuidado con aquellos que se sienten liberados por designio divino o por algún derecho universal. Lo único que cambia es el tamaño de la jaula o la calidad de sus barrotes. El poder de Dios y del Hombre sobre la raza humana se sustenta en la falsa promesa de Libertad y Felicidad...así, Religión y Política, han conseguido la mayoría de sus adectos.
ZOOLOGICO DE SAN DIEGO. CALIFORNIA
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